El tiempo es relativo.

A veces pasa que, sin que me de cuenta, se vaya todo un año de corrido.

Google images.

Y es cuando pienso que logré "sobrevivir" un año más. Recién me sorprendo ayer en pensar que ya estamos adentrándonos en febrero. Hay días en los que me pregunto si vivir se trata solamente de ver pasar el tiempo hasta que uno sea llamado a rendir cuentas cuando muere. Pero también han habido días en los que siento que el tiempo se me pasó tan rápido que ya es muy tarde para hacer lo que quería hacer. Y otros en los que no me preocupo en lo más mínimo por estas nimiedades. Han habido ocasiones en las que un mes (periodo de tiempo) fue más largo que el resto del año. Y otros en los que, sumida en periodos depresivos, solo quería que todo acabase. De la manera que fuera. Pero en esas ocasiones tenía tiempo para pensar tonterías (o sea, más xD). Igual tenía a mi mamá atrás de mí obligándome a cuidar mi aspecto personal, haciéndome mi comida favorita, ayudándome con los uniformes y haciéndose cargo de mí. Pero en tiempos actuales pasa que ahora yo soy la que tiene que responsabilizarse porque todo este en orden. Y he fallado mucho en eso. Pero lo bueno es que cuando no estoy así, mantenerme ocupada en casa me ayuda mucho. Creo que a final de cuentas solo me queda seguir adelante con mi tratamiento y esas cosas. Ya he aceptado que no puedo cambiar la esencia de mi persona, lo cual fue muy duro, pero necesario.

Haré unos cupcakes chimpas para mis amig@s en San Valentín. /o/