¿Por qué es tan grande la necesidad de autoatormentarse?

Antes que nada, una sincera disculpa porque hasta apenas recordé que tenía un blog. Han pasado algunas cosas que podrían considerarse buenas pero siempre siempre estará conmigo esa pequeña piedra en el zapato, que no me deja vivir como una persona normal. Lo gracioso de todo es que bien podría considerar cambiar de zapatos. Pero no puedo. No sé por qué me gusta sufrir a lo tonto y aunque me han dicho que es común la autodevaluación en alguien con mi trastorno a veces yo quisiera poder ser un poco más valiente. He oído tantas veces que yo (o sea, yo xD) merezco cosas mejores. Pero me ha pasado que cuando suelto aquello malo... Lo llego a extrañar. No sé por qué mi cabeza está configurada de tal forma que soy demasiado feliz con las migajas de todo. Porque resulta que cuando quiero un poco más topo con pared. Como si no lo mereciera. Estoy tan dispuesta a sacrificar mis propios sueños por seguir recogiendo migas. Y días como hoy son tan claros pero no logró rechazarlo e ir adelante donde me esperan cosas mejores. Quizás porque siento que alguien tan chocoso como yo no tiene derecho siquiera a pensar que en verdad lo merezca. Pero igual ahora es cuando debo tratar de sacar lo mejor de mí y ver si en un futuro no termino escribiendo otra entrada como esta.